Cuando la revista Time publicó su lista de las personas más influyentes en inteligencia artificial para el año 2025, pocos esperaban encontrar entre los nombres destacados al Papa León XIV. Sin embargo, su inclusión en la categoría de «pensadores» junto a figuras prominentes de Google y OpenAI no solo sorprendió a muchos, sino que también subrayó el creciente impacto del pontífice en las discusiones globales sobre tecnología y ética.
El Papa León XIV, nacido como Robert Francis Prevost y elegido en mayo de este año, adoptó su nombre en honor al Papa León XIII, quien lideró la Iglesia Católica durante la Revolución Industrial. Al igual que su predecesor del siglo XIX, León XIV ha dejado claro que su misión es guiar a la Iglesia frente a los desafíos sociales y morales de una nueva era transformadora: la era digital.
Una Nueva Revolución Industrial
En su primer discurso importante tras su elección, el Papa León XIV advirtió que la inteligencia artificial representa “nada menos que una nueva revolución industrial”. Enfatizó que el desarrollo de esta tecnología nunca debe comprometer los principios fundamentales de dignidad humana, justicia y trabajo. Esta postura recuerda la encíclica Rerum Novarum de 1891, en la que León XIII defendió a los trabajadores frente a las condiciones deshumanizantes de las fábricas durante la Revolución Industrial.
León XIV parece decidido a evitar que la historia se repita bajo nuevas formas de automatización. En junio, el Vaticano organizó una reunión global sobre inteligencia artificial, ética y gobernanza, un evento que atrajo a expertos de todo el mundo. Durante esta reunión, el Papa elogió los avances tecnológicos en campos como la salud y la ciencia, pero también expresó su preocupación por los riesgos asociados. En particular, advirtió sobre el peligro de permitir que los algoritmos distorsionen la búsqueda de la verdad o fomenten el conflicto y la agresión.
Continuando el Legado del Papa Francisco
La postura de León XIV no surge en un vacío. Su enfoque ético sobre la inteligencia artificial se basa en iniciativas previamente desarrolladas por el Papa Francisco, quien abogó por un tratado internacional para regular esta tecnología. Bajo el liderazgo de León XIV, esta visión ha adquirido una nueva urgencia.
El Catecismo de la Iglesia Católica enseña que «el trabajo es para el hombre, no el hombre para el trabajo» (CIC 2428), un principio que León XIV ha reiterado en sus intervenciones públicas. A medida que la automatización transforma industrias enteras, las preguntas sobre capacitación laboral, salarios justos y distribución equitativa de beneficios no son meros debates políticos; son cuestiones fundamentales de justicia y moralidad.
Una Perspectiva Pastoral
Lo que distingue al Papa León XIV en estas discusiones globales es su experiencia pastoral. Antes de asumir el papado, pasó años trabajando en Perú, especialmente entre comunidades agrícolas y trabajadores de bajos ingresos. Este contacto directo con las realidades económicas y sociales más vulnerables ha moldeado su visión sobre cómo debe abordarse el impacto de la inteligencia artificial en el empleo y la dignidad humana.
Lejos de basar su liderazgo en teorías abstractas, el pontífice aporta una perspectiva profundamente humana a las conversaciones sobre tecnología. Según Time, su inclusión en la lista de personas influyentes representa un contrapeso inesperado pero necesario: una voz espiritual que evalúa el progreso no por las ganancias económicas o el poder tecnológico, sino por su capacidad para salvaguardar la dignidad de cada persona.
La Ética como Prioridad
La insistencia del Papa en colocar la ética en el centro del desarrollo tecnológico no ha pasado desapercibida. Durante su discurso en junio, León XIV subrayó que cualquier avance en inteligencia artificial debe ser evaluado desde una perspectiva moral. Esto incluye garantizar que las tecnologías no perpetúen desigualdades existentes ni reduzcan a los seres humanos a simples engranajes dentro de sistemas automatizados.
En este sentido, su postura recuerda las enseñanzas sociales católicas que surgieron durante la Revolución Industrial. Al igual que León XIII defendió a los trabajadores frente a las máquinas de su época, León XIV parece decidido a proteger a las personas frente a los algoritmos y sistemas automatizados del siglo XXI.
Un Llamado Global
El liderazgo del Papa León XIV en temas de inteligencia artificial también refleja un llamado global a abordar esta tecnología desde una perspectiva inclusiva y responsable. Su participación activa en debates internacionales sobre ética tecnológica subraya la importancia de considerar no solo los beneficios potenciales de la IA, sino también sus riesgos para la humanidad.
En un momento en que las empresas tecnológicas lideran gran parte del desarrollo global, la voz del Papa introduce una dimensión única: una tradición espiritual que mide el progreso por su capacidad para promover la justicia y preservar la dignidad humanaConclusión
El Papa León XIV ha emergido como una figura clave en las discusiones sobre inteligencia artificial y ética global. Su liderazgo combina una profunda comprensión pastoral con un compromiso inquebrantable con los principios morales de la Iglesia Católica. En un mundo cada vez más dominado por algoritmos y automatización, su mensaje resuena como un recordatorio urgente: el verdadero progreso no se mide por avances tecnológicos, sino por nuestra capacidad para proteger y valorar lo que nos hace humanos.
Mientras el mundo navega por los desafíos y oportunidades de esta nueva revolución industrial, la voz del Papa León XIV promete ser una guía ética imprescindible. Su inclusión en la lista de Time no solo reconoce su influencia actual, sino también su potencial para moldear el futuro tecnológico desde una perspectiva profundamente humana.
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