El informe de la FIP pone de relieve la necesidad urgente de garantizar el acceso a la información como un derecho humano esencial, afirmando que los gobiernos y las instituciones deben comprometerse a proporcionar datos abiertos y transparentes.
En el marco del Día Internacional del Acceso Universal a la Información, que se celebra cada 28 de septiembre, la Federación Internacional de Periodistas (FIP) ha emitido un contundente informe en el que denuncia las crecientes restricciones al derecho a la información en todo el mundo.
El documento, basado en testimonios y estudios de sus afiliados, resalta los desafíos a los que se enfrentan los periodistas para acceder a información de interés público, especialmente en contextos de crisis, gobiernos autoritarios y conflictos armados.
La FIP subraya que estas barreras impiden el ejercicio de un periodismo libre y obstaculizan la democracia.
El informe pone de relieve la necesidad urgente de garantizar el acceso a la información como un derecho humano esencial, afirmando que los gobiernos y las instituciones deben comprometerse a proporcionar datos abiertos y transparentes.
En muchos países, la opacidad institucional es una constante, y la FIP reclama «No más secretos», abogando por la implementación de leyes de acceso a la información efectivas y por la protección de los periodistas que investigan temas sensibles.
África
En África, el informe destaca las dificultades que enfrentan los periodistas, especialmente en países donde la censura gubernamental y las represalias contra los medios son frecuentes.
El acceso a datos esenciales para la investigación periodística es extremadamente limitado, y los profesionales de la información enfrentan serias amenazas a su seguridad cuando intentan cubrir temas delicados como la corrupción o las violaciones de derechos humanos.
Países como Nigeria y Zimbabue aparecen como algunos de los más preocupantes en términos de libertad de prensa.
América Latina
América Latina es una región caracterizada por grandes desigualdades en el acceso a la información. Si bien algunos países cuentan con leyes avanzadas en esta materia, el informe de la FIP señala que, en la práctica, los periodistas se enfrentan a trabas burocráticas y a una falta de voluntad política para aplicar esas normativas.
México, en particular, es mencionado como un caso alarmante, no solo por la violencia contra los periodistas, sino por los continuos intentos de las autoridades por controlar el flujo de información.
En Argentina, bajo la presidencia de Javier Milei, la situación también genera preocupación. Aunque el país cuenta con leyes de acceso a la información relativamente modernas, el informe de la FIP advierte sobre el riesgo de retrocesos en la transparencia gubernamental.
Milei, conocido por su postura crítica hacia los medios de comunicación tradicionales, ha generado tensiones con el periodismo nacional, acusando frecuentemente a los medios de difundir «información falsa» o de formar parte de una «casta política corrupta». Estas declaraciones, combinadas con el endurecimiento de políticas contra la prensa en sus primeros meses de gobierno, han generado un ambiente hostil para el periodismo independiente.
El informe resalta además los desafíos que enfrentan los periodistas argentinos a la hora de acceder a información pública bajo el mandato de Milei. A pesar de las promesas de un gobierno más eficiente y con menos burocracia, los periodistas han señalado dificultades en obtener datos claves sobre la gestión pública, especialmente en áreas sensibles como la economía y las reformas estructurales.
Además, los temores de represalias contra aquellos medios que critican duramente al gobierno han crecido, lo que pone en peligro el pluralismo informativo en el país.
La FIP alerta que, en Argentina, el clima de polarización política y los intentos de controlar la narrativa mediática podrían derivar en una erosión significativa de la libertad de prensa si no se toman medidas para proteger el derecho a la información y a la libre expresión.
Asia
El escenario asiático, según la FIP, presenta un panorama igualmente desolador, donde países como China y Myanmar restringen severamente el acceso a la información, en especial en temas relacionados con derechos humanos y conflictos armados.
La censura y el control estatal sobre los medios son obstáculos evidentes, y el informe enfatiza que la creciente vigilancia digital complica aún más el trabajo de los periodistas en la región.
Europa
Aunque Europa goza de una tradición más sólida en cuanto a la protección de la libertad de prensa, el informe advierte sobre el creciente control gubernamental y corporativo en algunos países de Europa del Este, donde se están aprobando leyes restrictivas que obstaculizan el libre acceso a la información.
Además, la FIP alerta sobre las amenazas a los periodistas de investigación, quienes sufren acoso judicial y campañas de desprestigio en redes sociales.
Defender el acceso universal a la información
El informe concluye con una llamada a la acción urgente por parte de los gobiernos, instituciones y organizaciones internacionales para defender el acceso universal a la información y proteger a los periodistas que cumplen con su labor.
Dominique Pradalié, presidenta de la FIP, subrayó en una declaración tras hacer público el informe que «sin información no hay democracia» y que «los periodistas no deben ser silenciados ni amordazados».
Pradalié instó a los líderes mundiales a poner fin a la impunidad de los crímenes contra los periodistas y a garantizar que la transparencia sea un pilar fundamental en cualquier sociedad democrática.
Rafael Jiménez Claudín // @rjclaudin
Publicado el 27/09/2024 en Periodistas en Español