Se presentan algunas conclusiones relevantes de dos estudios de reciente aparición: Prosumidores, audiencias y consumo cultural en Venezuela, del año 2019 y Consumo informativo y cultural en Venezuela: estado actual y tendencias, del año 2023. Lo importante es que nos preguntemos a partir de estos estudios qué entendemos por consumo cuando interactuamos en diversos contextos con lógicas distintas y cuáles son las motivaciones por las cuales consumimos.
¿POR QUÉ EL CONSUMO SIRVE PARA PENSAR?
Nadie mejor que Néstor García Canclini para entender el concepto de consumo así como el de consumo cultural que desde una perspectiva antropológica se distancia del enfoque economicista del consumo en el entendido de que la persona consume pasivamente muchas veces de manera irracional y que está determinada por lasfuerzas del mercado. En su ensayo “El consumo cultural: una propuesta teórica”, publicado en el libro El consumo cultural en América Latina del año 1999, García Canclini define el “consumo” como un conjunto de reglas de convivencias y conflictos, de informaciones y significados que afloran entre los sujetos que consumen productos. Seguidamente este antropólogo argentino define el “consumo cultural” como el conjunto de procesos de apropiación y usos de productos en los que el valor simbólico prevalece sobre los valores de uso y de cambio o donde al menos estos últimos –de racionalidad económica– se configuran subordinados a la dimensión simbólica. Dicho de otra manera: cada objeto va a ser consumido como un texto abierto para ser completado y significado por el lector, el espectador, la audiencia y el “prosumidor”. Por lo tanto, es apropiado hablar de “consumos culturales” y no en singular porque para García Canclini el “consumo sirve para pensar”1 y diríamos que esta expresión siempre quedará abierta a la polisemia cultural porque también pudiéramos decir que el consumo sirve para pensar la sociedad posindustrial de redes sociales y dispositivos móviles, el consumo sirve para pensar el siglo XXI.
Un aspecto final que nos puede servir de orientación para entender los hallazgos y conclusiones que presentaremos a continuación es que García Canclini no solo reflexiona sobre el consumo cultural, sino que nos presenta una propuesta de modelos para el estudio del consumo cultural que son vinculantes y que nos invita a pensar con sentido crítico sobre la manera en que consumimos.
García Canclini propone seis modelos de consumo que definiremos de manera breve y literal:
Modelo 1: el consumo es el lugar de reproducción de la fuerza de trabajo expansión del capital. “Las necesidades de los trabajadores, su comida, su descanso, los horarios de tiempo libre maneras de consumir durante estos según la estrategia mercantil de los grupos hegemónicos.” 2 Modelo 2: el consumo es un lugar donde las clases compiten por la apropiación del producto social, con el fin de alcanzar poder y status social. Modelo 3: el consumo como lugar de diferenciación social y distinción simbólica entre los grupos. “En sociedades que se pretenden democráticas, basadas por tanto en la premisa de que los hombres nacen iguales, sin superioridades de sangre ni de nobleza, el consumo es el área fundamental para construir y comunicar las diferencias sociales.”3 Modelo 4: el consumo como sistema de integración y comunicación.
“Esto puede confirmarse observando prácticas cotidianas: en todas las clases sociales, reunirse para comer, salir, ver vitrinas, ir en grupo al cine o comprar algo, son comportamientos de consumo que favorecen la sociabilidad.” 4 Modelo 5: el consumo como escenario de objetivación de los deseos. “El deseo es errático, insaciable por las instituciones, que aspiran a contenerlo. Las comidas satisfacen la necesidad de alimentarse, pero no el deseo de comer, el cual se vincula, más que con el valor material de los alimentos, con el sentido simbólico de los rituales en que los ingerimos.”5 Modelo 6: el consumo como proceso ritual. “Los rituales sirven para contener el curso de los significados y hacer explícitas las definiciones públicas de lo que el consenso general juzga valioso. Cuanto más costosos sean esos bienes, más fuerte será la ritualización que fije los significados que se les asocian.” 6 Téngase en cuenta estos modelos de consumo al momento de enterarse de los estudios que presentamos a continuación. [Continúa leyendo…]
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