Fuente: Reporte Católico Laico
Gloria Cuenca:
Escribo con el corazón apretujado por la tristeza. Nuestro amado país tiene una imagen, que ni el mejor de los imagólogos, (asesor de imagen) podría mejorar. Sin embargo, les cuento, no para consolarnos, sino para entendernos mejor y comprender muchos aspectos que dejamos de lado, a menudo. Si quieren lo piensan y dicen, “la Gloria Cuenca resultó una sifrina, de otros tiempos”, lo acepto y lo asumo. No me importa ningún epíteto que me endilguen; cosas de la vejez, diría mi madre. La cuestión es que viajé mucho, desde muy temprano: a los Estados Unidos, a Europa, a China. Hice viajes extraordinarios pagados por mis padres, en primer lugar y por la Agencia Sinjua de noticias, cuando llegué hasta China. De nuestro peculio, Adolfo, (QEPD) y yo viajamos mucho por las islas del Caribe, lo que nos gustaba y a Estados unidos, que también nos encantaba. Gracias a los viajes, fui formando una opinión clara en torno a la visión, el afecto, empatía, simpatía o antipatía que existe, entre muchos de estos países que nos rodean, contra Venezuela. Fui a trabajar: dictar conferencias y asesorías, a estudiar también, por América Latina.
Visité Cuba en los albores de la Revolución Cubana, 1962. Sin embargo, fue cuando me tocó viajar a Colombia y Ecuador, para dictar conferencias o tomar cursos, sentí, percibí, me di cuenta de la molestia que sentían estos connacionales en contra de los venezolanos. Adelanto, la siguiente hipótesis: de los llamados países bolivarianos, se siente la gratitud y lo manifiestan Bolivia y Panamá. Ambiente distinto se percibe en Colombia y Ecuador. Según me cuentan, en Perú a los niños les ensenan que fueron libertados por el General argentino José de San Martín. Adolfo Herrera, comentaba: “Qué se queden con su argentino, falta no le hace al Libertador, ese reconocimiento” decía. Los colombianos, especialmente, los bogotanos, (cachacos) en menor medida los paisas, expresaban, abiertamente, el desagrado por haber sido liberados por Simón Bolívar. Ninguno de esos países tiene nada del igualitarismo venezolano. La Guerra de Federación ocurrió en nuestro país en el Siglo XIX, y selló de esa manera nuestro tuteo, el igualitarismo y ese ser Caribe, tan especial. Definitivamente, los controles sociales, raciales y económicos, el distanciamiento y exclusión, de Ecuador y Colombia, no tiene nada que ver con Venezuela. Particularmente, no conozco a Perú, por eso no opino.
El hecho concreto, es que creo que los países, llamados bolivarianos, no se sienten para nada ni bolivarianos, menos agradecidos, por haber sido independizados por nuestro gran Libertador, que por cierto, murió tan joven por haberse entregado a las luchas a favor de la independencia de América Latina. De manera que mala imagen, hubo siempre, según mi criterio, solo que el poder que tenía Venezuela, hacía que no se atrevieran a expresar lo que pensaban realmente. Muchos no se dieron cuenta de esto, otros solo se relacionaron con las elites, lo que era diferente y nos ponía entre la diplomacia, la buena educación y también, la hipocresía. Será en otra oportunidad cuando termino estas ideas.
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